Cada escalón parecía mas alto que el
anterior, cada bocanada de aire le duraba menos, el sudor le empañaba
la vista y la sexta planta cada vez parecía estar mas lejos, mas
arriba, inalcanzable. Ella iba delante, volviéndose de vez en cuando
para comprobar los signos vitales de su marido. Llegado a la segunda
planta él hombre se tuvo que parar un momento para cobrar el
aliento. Ella se volvió y resopló despectiva.
-A ver si arreglan de una puñetera vez el ascensor, que estoy harta de verte así. Cada vez te cuesta mas subir las escaleras. Vamos, que te espero arriba, - ladró mientras sacaba las llaves del bolso y mas ligera que una gacela se perdía escaleras arriba.
Él volvió a iniciar la marcha forzada y después de otros cuantos parones consiguió llegar a la puerta de su casa que le esperaba abierta.
Soltó las 5 bolsas con la compra de la
semana que llevaba en una mano en el hall de entrada, el radiador de
aceite que acababan de adquirir y que sujetaba bajo el otro brazo lo
dejó en el suelo del salón, luego en el balcón dejó caer el saco
de 25 kilos de patatas que tenia colgado en la espalda a modo de
mochila.
-¡Por fin! -escuchó el tono irónico de su mujer desde el hall. ¿Pero tanto trabajo te cuesta dejar las bolsas en la cocina, joder?
Saludos azules desde mi playa que espera...
ResponderEliminarJa, ja que bueno el pobre normal que le costaba,feliz semanita, un abrazo.
ResponderEliminarJajaja. Pobre hombre... qué mujer más tirana le tocó en suerte. Besotes!!!
ResponderEliminarUy pobre hombre. Me hiciste reír genial relato
ResponderEliminarHola Sheol, buenas tardes,
ResponderEliminartolerancia?
habría que buscar una palabra que abarque ésta y tantas otras que me vienen a la mente para no mandar todo a la mier... jajaja
Un gran abrazo
¡Holaaa! ¡Uffff! ¡Cómo están los ánimos! una historia muy consuetudinaria, muy de todos los días, vaya... Es lo que tiene la convivencia, estas peleítas ordinarias. ¡Cómo fastidia lo del ascensor! Y guardar toda la compra tiene su mérito. A mí la verdad que me gusta, soy bastante marujo, jajaja... Un abrazo!!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarEso no es equitativo, si el asesor falla, debería existir apoyo (creo yo).
ResponderEliminarUn abrazo.
Muy bueno y muy bien planteado :)
ResponderEliminarWaru-besos!
http://twaruwaru.blogspot.com
Hola, Sheol13.
ResponderEliminarAunque no es lo habitual, también hay mujeres que hacen daño moral, o físico incluso, a sus parejas.
Detesto la violencia, venga de donde venga y la infrinja quien la infrinja.
Muy buen texto, amigo.
Besos.
jajaja
ResponderEliminarqué mala son las mujeres!
mejor algunas mujeres, otras son ellas las que se encargan de ir solas a la compra, de cargar en el carro del supermercado o hipermercado lo que su familia necesita para alimentarse, traspasar toda la compra al maletero del coche, llegar a casa y descargarlo sola... también hay mujeres que cargan con el saco de 5 kg de patatas o el tambor de 8 kilos de detergente o las botellas de 5 litros de aceite... jajaja
un abrazo
Qué asco de mujer por dios...
ResponderEliminarEs buenísimo el escrito. Sí, hay personas así, que no piensan en nadie más que en ellas mismas...
Muchos besos.